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MARTES SANTO
15 DE ABRIL
La Iglesia vive hoy el Martes Santo, día en que la liturgia nos lleva al corazón del misterio de la entrega de Jesús. En el Evangelio, contemplamos a Cristo en la Última Cena, anunciando con dolor la traición de uno de los suyos y el camino de negación de Pedro. Jesús no se detiene ante la fragilidad humana, sino que, con amor fiel, se entrega igualmente por todos.
Este día es una llamada a la sinceridad del corazón, al examen profundo de nuestra fidelidad al Señor, y a confiar en su misericordia que restaura. El Martes Santo nos prepara a entrar, con humildad y esperanza, en el drama de la Pasión, sabiendo que Dios es más grande que nuestras caídas, y que su amor no nos abandona jamás.

JESÚS VUELVE A JERUSALÉN
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